Cogemos a las galletas Oreos de toda la vida y las separamos. Metemos un pinchito de madera y se coloca tal y como en la imagen:
Acto seguido se pone un poco de chocolate fundido para que el palito no se salga:
Ya podemos pegar la otra parte de la galleta encima y dejarlo secar.
Mientras tanto derretimos chocolate blanco en el microondas, atención, que si el chocolate blanco se calienta demasiado se estropea, así que ir poco a poco calentandolo.
Luego ir coloreando el chocolate blanco fundido con colores alimenticios según los gustos y a mojar Oreos:
Como se puede apreciar, el chocolate blanco chorrea un poco y por eso hice una base de poliespan o algo parecido que tengais por casa, para que podais pincharlo y se pueda secar tranquilamente:
Me topé a estas alturas con varios problemas:
1. Que como era verano, los Oreo Pops no querían secarse por mas tiempo que pasara
2. Cómo voy a transportarlo 30 km con el coche hasta el lugar del cumple?
Y ya que había llegado hasta aqui y tenía que terminar el proyecto opté por esas soluciones:
1. Congelar en el congelador los Oreo Pops (otro reto, porque a ver como meto los Oreo Pops en el Congelador tal cual estaban)
2. Transportar los Oreos en un recipiente puestos en fila separandolos con papel para hornear, teniendo miedo que se me fueran descongelando.
Al final y como podeis ver, los Oreo Pops llegaron sanos y salvos al lugar del cumple. Pero si quereis saber mi consejo si os animais a hacerlos: NO hacerlos en verano, y mejor no tener que transportarlos luego. Así que : Oreo Pops para invierno y en casita!!!!